20 enero 2014

Ekaitz




Una tormentosa tarde de julio, en el instante preciso en que salía del cine, un rayo cayó sobre mi madre. Al parecer, entró por su cabeza y escapó pérfidamente por un pie, para hundirse finalmente en las entrañas de la tierra. Las quemaduras fueron tan graves que tuvieron que hacerle varios injertos en “la zona de salida” y jamás superó su cojera y su fobia a las tormentas, pero, milagrosamente, sobrevivió. Haciendo gala de un misticismo que no había exhibido hasta la fecha, aseguraba que nunca supo a ciencia cierta qué parte de sí misma le había arrebatado el rayo, pero estaba convencida de que la había elegido como receptora o “puerta a este planeta” por alguna razón.
Lo más insólito del caso, es que en aquel extraordinario momento, nadie, salvo ella misma, sabía que estaba embarazada de tres meses. Como es natural, al conocer la noticia cundió el pánico generalizado en mi familia. Amparándose en la excepcionalidad de la situación, todos estaban de acuerdo en que era más que probable que el rayo, durante su ataque oblicuo, hubiera atravesado al bebé en algún punto, dañándolo sin remedio. Sin embargo, y para sorpresa familiar, una serie de exámenes y pruebas revelaron que el niño, no sólo había sobrevivido, sino que se encontraba en perfecto estado de salud.
 
Durante mucho tiempo nadie pudo encontrar un precedente similar. La posibilidad de ser alcanzado un rayo es del 1 entre 3.000.000 millones. ¿Cuántas posibilidades hay de que, además, caiga sobre una mujer embarazada? En el momento en que se confirmó oficialmente que el niño nacería sin secuelas, mi madre supo instantáneamente cuál sería su nombre, Ekaitz, que significa tormenta en euskera.
Y, ahora que sabes la historia de mi nombre, querido lector, debes conocer la historia de mi muerte, que es la misma.
 
[TO BE CONTINUED]

6 comentarios:

  1. Me ha encantado el comienzo. De verdad.
    Estoy deseando que continúes la historia
    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias, Mientras Leo :)

      Es imperdonable no sólo no haber acabado aún la historia, sino no haberme pasado a agradecerte el post.

      Kisses retardados ***

      Eliminar
  2. Me recuerda a no. Es mentira a nada. Sólo podría recordarme a otro texto tuyo y hace tanto que no paso que...ná, seguro que es porque no se parece a nada. Me gustaría que no muriese y tuviese poderes. De algún tipo. Pero que fueran inservibles también. Eso sería gracioso :)

    Besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Thank you, A.

      Si hace tiempo que tu no pasas, hace aún más tiempo que no paso yo, lo cual si es realmente imperdonable.

      No se me ocurre mejor piropo que el que te digan, en estos tiempos de clones y reciclajes que nos han tocado vivir (demasiado tarde para podernos permitir cierta originalidad) que no te pareces a nadie ni a nada. Ojalá :)

      Thanks again. Espero que todo "te vaya bonito".

      More kisses ***

      Eliminar
  3. Cuanto tiempo mi niña, me encanto,alhy como siempre, tienes una forma de relatar tan especial...impaciente por leer la continuación....
    besosssss

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¿Qué ven mis ojos?¿Has vuelto, nena? :D

      Gracias por acordarte de mi y por dejar tu feedback, que es como un abrazo a distancia. Me alegra muchísimo tenerte por aquí y espero que tu retorno no sea algo puntual :)

      Read you!

      Un kiss XXL ***

      Eliminar

In cyberspace, everybody can hear you dream...

Related Posts with Thumbnails