1- Mr
Cool T-Shirt guy
Mr Cool
camina por el pasillo del hospital con la cabeza en los pies y los pies en la
cabeza.
Ajusta los
tatuajes de sus musculosos brazos, mira sin ver el laberinto, y busca en las
desgastadas baldosas el hilo extendido que, en algún momento (¡oh, estrategia!)
le enseñó a utilizar Ariadna.
No lo
encuentra.
Sólo hay
laberinto y en la habitación 2319 le espera un minotauro.
Y Mr Cool
comprende, finalmente, que ya no hay garantía de encontrar, indemne, el camino
de vuelta.
*
2- Rebotar
(La letra pequeña)
¿Cuántas
veces puede caer una hoja seca
sin
desmembrarse?
¿sin bailar
con las zapatillas rojas del viento?
¿sin crepitar
bajo tacones y escarchas?
¿sin sucumbir
al canibalismo de la tierra y la lluvia,
o a la
causticidad del sol?
¿Cuántas
veces puede caer una hoja seca
sin ser
reclamada por la justicia de los árboles?
¿Cuántas
veces?
3- Mosquiteras
Las ventanas
de la cuarta planta están cubiertas por mosquiteras para proteger a sus
debilitados enfermos. Además de inmonudeficiencias, contienen corrientes. Todo
está bajo control. Nada fluye ni permanece, ni siquiera la duda. La cuarta
planta es una sofocante marea de asepticidad enrarecida en la que, contra todo
pronóstico, excepcionalmente, se cuela un mosquito.
*
4- Esperando
a Eva
Dos ventanas
limitan el pasillo de hematología.
Es largo,
afortunadamente.
El doble
gotero le sirve a la anciana de improvisado bastón. Su voluntad es infatigable,
pendular, oceánica. Siempre regresa.
Cierta
oxidada rigidez se apodera de su desgastado cuerpo, pero, como Wall·E, no
desiste en su tarea (La lleva prendida a su muñeca).
Cada nuevo
paso podría despertar a Eva.
5- Hope
Odia el pan
del hospital
Su bandeja
devuelve, intactas, barras enteras.
Un gorrión
aparece oportunamente y nos observa con su inocencia azul desde el otro lado de
la pétrea mosquitera.
Intento enviarle
migas de pan sin éxito y él me mira sin comprender que todo está a su favor: el
verano, las transitadas calles, la noche estrellada…
Todo está a
su favor. Sin embargo,
yo no puedo
alimentarlo.
*
6- Para
que tú no lo sepas
No te creas
todo lo que te muestran tus pesadillas.
Siempre hay
naves de hueso transitando por los márgenes
de los mapas
que te guían.
Tu infierno
está vertebrado, definido, retroalimentado,
al abordaje
de la cáscara de nuez que es tu consciencia,
royéndola,
crepitando en
susurros,
lenta e
imperturbablemente,
como termitas
en la madera.
7- The Dementor’s Kiss (The prestige)
“Every great magic trick consists of three parts or
acts. The first part is called "The Pledge". The magician shows you
something ordinary: a deck of cards, a bird or a man. He shows you this object.
Perhaps he asks you to inspect it to see if it is indeed real, unaltered,
normal. But of course... it probably isn't. The second act is called "The
Turn". The magician takes the ordinary something and makes it do something
extraordinary. Now you're looking for the secret... but you won't find it,
because of course you're not really looking. You don't really want to know. You
want to be fooled. But you wouldn't clap yet. Because making something
disappear isn't enough; you have to bring it back. That's why every magic trick
has a third act, the hardest part, the part we call "The Prestige".”
Christopher
Priest
Una siempre
espera, ingenuamente, que no la saques a bailar.
Pero me
escogiste y me besaste
(siempre por
azar).
Fue un beso
violento.
Sabía a
infinito.
Me ahogaba.
Tu aliento de
araña paralizaba mis huesos.
Y así, mi
esencia se condensó en el vértice de ese beso.
El país de
los monstruos era mi hogar
ahora.
Y todo lo que
abrigaba mi corazón, pasó a ser tuyo.
Todo lo que
me arañaba redefinía mi alma.
¿Hasta cuándo
piensas quedarte?
¿Hasta quién?
Hace
demasiado frío en tu prestige,
o tormenta de
arena.
Si no separas
tus labios,
me desharé
con ella.
*