23 febrero 2012

Aunque tu nombre signifique piedra




Quiero morder la manzana
blanca y redonda de tu hombro.
El único acento que,
artero,
al verme,
marca tu cuerpo.

El rostro grave,
la mirada extraviada en una órbita externa,
la espalda férrea de torreón o vigilante
y las manos transferidas a la arcilla.
Pero tu hombro no,
tu hombro señala,
reclama,
sentencia.

No te engañes.
No deseo
los dibujos del cometa,
ni su mecano arrepentido,
sólo reclamo
una manzana
furtiva,
blanca y redonda.

*

7 comentarios:

  1. Me ha sacado una sonrisa :) Qué declaración de intenciones tan sensual.

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  2. Hacía mucho que no actualizaba y me daba cosa tener el blog tan abandonado. Entonces recordé un poem vergonzosamente adolescente que le escribí a un chico llamado Harkaitz (en euskera significa piedra o roca), y que, probablemente, sea el chico más guapo que he conocido en el mundo real.

    Gracias por el feedback, coraçao, pero no prometo no borrarlo ;)

    Kisses ***

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  3. A mi los hombros siempre me han parecido muy sensuales. Me ha gustado : ) Así que no lo borres, que todos tenemos ruborizados poemas adolescentes XD

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  4. Gracias por tu post, héroe :)

    Lo dejo por no borraros los comments, aunque eso de echar mano del material "no nuevo" se acabó.

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  5. ay ay, cuánto daño hizo Blancanieves... ;))

    (artero, artero, artero)

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  6. ¿Seguro que sólo querías morder un hombro? :P
    ¿Por qué no tirar del cajón de poemas olvidados? A lo mejor te encuentras alguno que ni recordabas (y te vienen a la memoria sensaciones como las que te provocaba el chico con nombre de piedra)

    Abrazoo :)

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  7. Eso vengo haciendo demasiado ultimamente, Lucia. Rescatando del pasado porque lo nuevo, o bien no me convence, o no está acabado.

    Gracias por los ánimos :)

    Otro abrazo ***

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