12 junio 2010



3- Lorie

Al cruzarse con ella aquella mañana, la gente se la quedaba mirando con una mezcla de curiosidad y extrañeza; pero durante los cinco minutos que permaneció inmóvil, bajo la inoportuna lluvia de domingo, Lorie fue incapaz de verlos. Toda su atención se concentraba en un punto fijo, a pocos metros de distancia. Ese punto la atraía y la repelía al mismo tiempo. Concluida la lucha interna, decidió acercarse. Era mucho peor de lo que había imaginado. Aquel cachorro cruce de bobtail no sólo tenía la mandíbula y la pata derecha rotas, sino que presentaba síntomas de leishmania grave y estaba infestado de pulgas. Se encontraba tan débil, que si no recibía atención medica inmediatamente, el frío, la humedad y la fiebre acabarían con él.

Lorie le apartó el sucio pelo de los ojos y le habló suavemente, tal y como habría hecho con un paciente humano. “Tranquilo, pequeño. Vas a ponerte bien”. El animalillo la miró con una mezcla de ternura y sabiduría infinitas, como si fuera, al mismo tiempo, un niño y un anciano. Conmovida por aquel rotundo y emotivo “gracias”, Lorie se quitó resueltamente el abrigo, envolvió al cachorro con él y se lo llevó en brazos.

Ahora necesitaba un plan. Hoy era domingo. Las clínicas veterinarias estarían cerradas. Podría averiguar si había alguna de guardia, pero para eso necesitaba tiempo. No lo tenía, el animal estaba muy enfermo y ella debía llegar al hospital para comenzar su ronda de traumatología. Normalmente, iba caminando al hospital, aunque hoy, con el coche en el taller y sus amigos pasando el fin de semana fuera, sólo le quedaban dos opciones. Se decantó por la primera, pero la cara del conductor del autobús se transformó en una máscara al verla.

- No puedes subir aquí con eso- escupió.
- Por favor, sólo estamos a diez minutos del hospital. Apenas hay pasajeros. Me colocaré al lado de la puerta, no molestaré a nadie. Haga una excepción. ¡Si no llego pronto, se me muere!
- Lo siento, pero no se permiten animales. Además, si eso infecta el autobús o muerde a un viajero, ¿qué pasa?

Lorie abandonó la parada del autobús con una mezcla de frustración y rabia. Opción número dos. El taxi sólo tardó dos minutos en llegar, pero la reacción del taxista fue aún más fría y tajante.

- Ese bicho está hecho un asco. ¿Qué quieres, que me manche todo el coche de porquería?
- ¿Y si fuera una persona herida tras un accidente? ¿también le preocuparía la maldita tapicería?
- Una persona es una persona. Eso sólo es un puto chucho de mierda.

Mientras caminaba furiosa y desalentada aunque decidida en dirección al hospital, el día pareció recrudecerse. Cada vez llovía con más fuerza y el pequeño can parecía haberse desmayado en sus brazos. Apenas se había quejado. Sólo un pequeño aullido de dolor cuando abandonaron la parada de taxi, casi una protesta contra el insensible taxista.
Lorie temblaba visiblemente cuando cruzó la puerta del hospital. Y además de las miradas de espanto de pacientes, médicos y enfermeras, chocó contra la barrera de 80 kilos que conformaba la enfermera jefe.

- No puedes pasar con un animal, Lorie. ¿En qué coño estabas pensando?
- Estaba medio muerto en mitad de la calle, me necesitaba
- ¿Y no crees que hay lugares para eso?- espetó inconmovible
- Está agonizando y es domingo, Francine. Sabes que no tiene ninguna posibilidad a menos que..
- Me da igual que esté moribundo o que sea el puto día de la mascota. Aquí no entra. ¿Acaso quieres infectar el hospital?
- ¿Qué sugieres que haga? ¿qué lo deje morir en mitad de la calle? – varios médicos parecían haberse unido como espectadores a aquel debate improvisado. Sus caras de menosprecio denotaban su apoyo a la oronda Francine.
- Lorie, o te lo llevas ahora mismo o llamo a seguridad.

Derrotada, al borde del llanto, Lorie taladró a la enfermera con una mirada de desprecio absoluto, se dio la vuelta y desapareció por la puerta principal. Una vez bajo la lluvia y tras comprobar aliviada que el pequeño corazón del animalillo seguía latiendo, decidió que tenía que volver a intentarlo. Si sólo pudiera bajarle la fiebre y recolocarle la mandíbula. ¡Maldita sea, he sido entrenada para salvar vidas!
Mientras caminaba sin rumbo fijo, con los brazos doloridos, se topó con su amiga Elise, que había presenciado su polémica entrada desde la cafetería. ¿Un apoyo por fin?

- Puedes pasar por el aparcamiento sin problemas. Las cámaras de seguridad se han estropeado hoy. Hay un cuarto de limpieza donde podemos improvisar un quirófano.
- ¡Genial!
- Puedo mangar algunas cosas para tu operación, pero no puedo quedarme, Lorie. Sabes que hoy...
- Sí, lo sé, traumatología
- ¿Sabes a lo que te arriesgas al no aparecer, verdad?- preguntó visiblemente preocupada
- Sí, su vida, Elise

Diez minutos después, disimulado bajo unas sabanas, el pequeño cruce de bobtail, había burlado al personal y descansaba finalmente en su quirófano. Esforzándose por recordar las escasas lecciones de veterinaria que había recibido durante aquellos años, Lorie pasó las siguientes dos horas interviniendo al dolorido animal. Descubrió que la pata, la mandíbula y la leishmanía eran el menor de sus problemas. Desnutrición, deshidratación grave, anemia, hipotermia, un preocupante hemograma y la infección brutal que le había destrozado la boca, conformaban el terrible cuadro que lo había ido consumiendo durante días. ¡Días!.

Cuando tres horas más tarde tomó la decisión, Lorie hacía tiempo que había olvidado el entumecimiento de sus brazos y las protestas de su estómago. Nunca le había costado tanto poner una inyección. ¿Resultaría todo más fácil si pudiera explicarle lo que le está pasando?.
Lorie decidió que no.
Mientras observaba su mano vacilante, el can la miró fijamente, como intentando tranquilizarla. ¡Me está dando permiso. Se quiere marchar! Duró sólo un segundo. Medio cegada por las lágrimas, acarició al animalillo tiernamente hasta que se convirtió en un amasijo inerte de cables, huesos, pelo y parásitos.
No podía seguir allí, necesitaba un cigarrillo.

El aparcamiento estaba inquietantemente vacío y silencioso. Lorie, teblorosa, recordó con nostalgia su ahora mugriento y apestoso abrigo. Se abrazó a si misma mientras daba la primera calada a su cigarrillo. Por algún motivo se resistía a volver a casa. Los minutos parecían arrastrarse pero, calada tras calada, algo iba tomando forma en su mente. Un ejercicio de catarsis que, con sólo acariciarlo, transformaba su dolor, impotencia y frustración. Prefería sentirse rabiosa antes que triste, la hacía sentirse poderosa.

Llevada por un impulso irreprimible, sacó la llave de casa del bolso y comenzó a rayar, uno a uno, los coches de la sección VIP del aparcamiento. Lo hizo lenta pero concienzudamente, como si en lugar de rayarlos escribiera en ellos ideogramas chinos. Aunque, bien pensado, tal vez, de alguna forma, lo fueran. Lorie sabía que ninguna de aquellas personas podía leerlos...



Dedicado a tod@s l@s que nunca pasan de largo :)

14 comentarios:

  1. Jo, que emotivo. >///<

    Me gusta Lorie *_____*

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  2. La idea de este relato a tres bandas viene de hace mucho tiempo (aunque inicialmente el título iba a ser mas largo). Quería mostrar el momento en el que tres mujeres distintas en tres lugares del mundo diferentes ven derrumbarse ante sus ojos un pilón importante en sus vidas.
    Las tres viven en una burbuja que se han creado, una especie de farsa que, además, es alimentada socialmente.

    Como diría mi Yoda "todas pierden una ilusión, pero ganan una verdad". Una verdad dolorosa.

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  3. buuuff...me ha dejado hecho el polvo el relato de lorie. muy triste. tan triste que no puedo escribir.nada que no sea muy triste. y no quiero escribir hoy nada triste. no tengo pinturas amarillas hoy.

    dicen standstill "vamos a cambiar
    toda la ilusión por curiosidad" pero supongo que hay más tipos de ilusión de las que puedo imaginar.

    muy buenos relatos. ya conocía alguno, pero leídos los tres en conjunto dan una visión global diferente.

    bss

    j

    ps. phingen phingen!

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  4. Ahora que explicas la idea de la burbuja todo encaja mejor, pues aunque todas puedan desenlazar en una idea de dolor y descubrimiento, es con tu explicación donde queda aún más claro.

    Eso si, me gustaría añadir, ya que conozco la idea, que el de verdad más intensa para mi es sin duda el primero, diez años de relación, y también Daniel...

    Quizá otros lectores no, pero como te comentaba me he sentido demasiado identificado con ese personaje. Yuki también podría estar sufriendo mucho, pero al ser abierto no palpamos tanto ese dolor, sólo podríamos llegar a imaginarlo (y al hacerlo puede que incluso sea peor, pero... mientras no nos lancemos demasiado a ese pozo de la imaginación duele en cantidad "moderada").

    El último es un dolor constante, de esos que te hacen despertar también, pero me parece más "cercano" (por decirlo de alguna manera), y al sentirlo así me parece más llevadero.

    Intentaré explicarme, estoy seguro de que cualquier amante de los perros/animales quizá lo sentiría como el más doloroso, pero a mi particularme el primero me parece en un estadio superior porque habla de sentimientos de personas a personas. Y eso siempre me transmitirá más intensidad.

    En que estamos de acuerdo es que todos son dolores diferentes, y aportan cosas distintas, te tocan una parte diferente de la fibra sensible y llenan con su particular energía propia.

    Tenía que volver a comentarte, pues me ha hecho mucha gracia eso de "tu Yoda" jajajaja (Que tiene toda la razón, por cierto).

    ¡Besoludo! (Que es un beso y un saludo a la vez)

    P.S: Que ilusión cuando te pasas por Luzy a dejar tus huellas inmensas que brillan como luces de neón ^___^

    P.S2: Apuntado "Posibilidad de una Isla" como libro pendiente, quiero algo tan arriesgado que pueda removerme por dentro (en cuanto lo lea volveré a comentarte que me parece en una posdata gigantesca). Tu comentario ha provocado demasiada curiosidad en mi como para dejarlo pasar jajaja = )

    P.S3: ¡Claro que te había leido en la entrada anterior! Pero tenía que preguntar >/////< ajjajajaja

    *Ilusión* ^///^

    P.S4: Creo que en el futuro el amor real empezará siendo, casi siempre, virtual... >___<

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  5. Tarzan?
    Rita la singer?
    ... where are you?

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  6. Es un relato muy realista, que arranca las mismas lágrimas que una verdad dolorosa como una bofetada, justo en el momento en el que menos la necesitas. Las verdades negativas tienen el don de la inoportunidad, o será que nunca es buen momento para recibirlas.

    Ahora llega el momento en que me quito el sombrero, y te aplaudo de corazón.

    Kisses de congratulations***

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  7. Buena idea preside este relato a tres bandas. ¿Has pensado extenderlo? Es un buen comienzo para un libro de historias cruzadas...

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  8. Mr Héroe, Welcome back! Ya imaginaba que estaría abducido por el "June efect" (I've been there). Espero que tenga suerte :)

    Gracias por sus posts. Si surgen más historias POP en mi cabeza (lo cual es bastante posible) me lo plantearé. Lo importante siempre acaba volviendo o demandando la atención/espacio que merece.

    El hecho de que no me haya dicho nada de este last relato en concreto, me lleva a pensar varias cosas (corrígame si me equivoco).

    a) No lo ha leido
    b) Lo ha leido, no le ha gustado y ha preferido irse por las branches
    c) Le ha incomodado y no ha sabido que decir.

    ;)

    Welcome kisses ***

    P.S. A ver si actualiza soon, que tiene su blog abandonadísimo ;)

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  9. Lo he leído y me ha gustado, pero como era el primero quería hablar de la idea ;)
    De hecho, tengo razones para identificarme en parte con Lorie.
    Mi perro favorito de los que tenía mi abuelo fue sacrificado porque le atacó un jabají. Yo tenía 7 u 8 años y todavía me acuerdo.
    Un día,al abrir el contenedor, me encontré una bolsa de plástico con gaticos recién nacidos dentro. Los había tirado la loca de la calle.
    Yo llamé a un amigo y los sacamos de allí. Avisamos a un vecino. Este se lo dijo a la loca y ella los estampo contra el suelo delante de nosotros, uno a uno. No rayamos ningún coche ni tampoco lloramos, simplemente nos quedamos paralizados. Traumatizados. Hoy, 15 años después, seguimos recordando esa imagen atroz cuando nos juntamos.
    Tenías razón, el tema me incomodaba. Ahora ya lo he soltado, discúlpame si esto no viene a cuento.

    Pd: El blog no se actualizará, everybody knows.

    Un beso.

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  10. Ah, y lo de no rayar coches no es una crítica a Lorie ni al texto, me refiero a que nosotros no pudimos quitarnos esa frustración de encima y aquí sigue.
    Que cosas pasan en los pueblos.

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  11. Impresionante historia, porque madre mia, se me ha puesto la piel de gallina.

    Es flipante lo asqueroso que puede llegar a ser el humanos, solo preocupandose de memeces y absurdeces, y cuando realmente lo tienen que dar todo, por una causa no hacen nada y tratan a un animal como si fuera una autentica mierda, la verdad es que es indignante.

    Ojala hubiera mas personas como Lorie, tenemos tanto que aprender de ella.

    Gracias por compartir su historia con nosotros!

    kissesss

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  12. Ais... =~(((

    Solo puedo decirte gracias gracias gracias! Gracias por hacerme llegar este relato y por dedicármelo. Me he emocionado mucho mucho...Cuántas veces he vivido situaciones parecidas a la de Lorie. La misma tristeza, desesperación, la misma incomprensión, el mismo dolor y rabia. Ver animales en las calles cada día y pensar que para intentar ayudarlos tendremos que pasar por todo eso nos quita mucho la fuerza, el valor. Pero eso sí, nunca vamos a conseguir pasar de largo. Ojalá existieran más Lories y mas Elises en el mundo. Un beso bien grande para ti, linda!!! Todavía no puedo dejar de llorar...Glup!

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  13. Hola!
    Llego algo tarde a las tres historias, pero no he tenido el tiempo suficiente antes.
    En la primera y la segunda sí vi la conexión, en esta última me ha resultado más difícil porque me he acordado de cuando tuvimos que llevar a uno de nuestros perros al veterinario para que le hicieran la eutanasia. Es una decisión realmente dolorosa.
    Me han gustado mucho los tres relatos, especialmente el segundo, no sé si sería tu idea, pero me he imaginado a la prota queriendo creer que estaba mejor sola, pero derrumbándose ante un poquito de cariño.

    Besos

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  14. La realidad muchas veces supera la ficción.
    ¡Lorie es un ser lleno de luz que un montón de insensibles del carajo,no deberían apagar!
    Yo le pateaba el trasero a todos esos insensibles del carajo y después les pinchaba las ruedas de sus coches,que le jode más.
    ¡Ains,que cabreo me ha entrado!

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In cyberspace, everybody can hear you dream...

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